Surulere

Anillos hechos en plata y bronce macizos


Piezas con piedras naturales


Precious Places

Novedades | Expos&Ferias

Precious Places

Vanessa Kubach

Precious Places es la nueva exposición de Precious Collective, comisariada por Lynne Speake, que se realizará en la galería Alliages, Lille, desde el sábado 12 hasta el 5 de diciembre.

Participan Adriana Del Duca, Claude Lescar, Dan Russell, Dina Abargil, Elisabetta Nevola, Elizabeth Shaw, Holly Stant, Iro Kaskani, Jillian Moore, Juan Riusech, Kate Bajc, Lynne Speake, Melis Agabigum, Miruni Belicovici, Rachael Colley, Rachel Butlin, Salvador Vico, Sarah Drew, Svetlana Progoditch, Vanessa Kubach, Verena Krems y Viktoria Munzker.

Rachel Butlin

Salvador Vico

Adriana Del Luca

Dan Russell

Kate Bajic

Dina Abargil

Elizabeth Shaw

Juan Riusech

Jillian Moore


El cuerpo como soporte de la joyería

Apuntes | Notas

El cuerpo como soporte de la joyería


Usos, costumbres, propósitos o ganas de innovar y expresarse de manera diferente. La joyería se lleva en cualquier parte del cuerpo y si se utiliza en la cara y en las manos las trascienden en volumen y forma, no siempre anatómica.

Usar o no usar. O usarla dónde. Si la portabilidad de la joyería contemporánea hace a su esencia es un tema sobre el que se pronunciaron no pocos y que se discute con opiniones encontradas en muchos ámbitos del circuito joyero. Deconstruir el uso de piezas de joyería contemporánea es la obsesión de varios artistas o, simplemente, su forma de ver y crear. Por cualquiera de los dos motivos, consiguen innovar no solo en el hacer sino en el mostrar, al presentarlas en una puesta fuera de lo común o al sugerir portarlas en otras partes del cuerpo. En algunos casos, son el resultado de la idea de entablar una relación diferente con el cuerpo, usándolo como soporte y así convertirlo en vidriera corporal.

No son piezas que sólo se usan en partes distintas a las orejas, el cuello y las manos, pero si se llevan en ellas no son perfectamente anatómicas, sí cómodas aunque las trascienden en volumen y formas. Muchas nacen fuera de lugar, ya que son creadas especialmente para lucir en partes atípicas como la nariz, la boca, la frente o hasta en los pómulos o el pecho, entre otras.

Plantear otros conceptos, cambiar la funcionalidad, buscar otro propósito, salir de cánones o romper con estereotipos y liberar las formas es el resultado, en algunas ocasiones sin planteárselos. Ingrid Rizzieri, Joanne Tan, Ewa Nowak, Sara Sallam son algunas de las que apuntan a descontracturar aún más la joyería contemporánea, a mostrarla más allá de las convenciones.

Antes de estas propuestas contemporáneas, podría citarse como antecedente al dúo de diseñadores de moda holandés integrado Gjs Bakker y Emmy van Leersum que crearon una serie de joyas corporales que se vieron en el Stedelijk Museum de Ámsterdam, a fines de los 60. Gijs + Emmy y su por entonces colección disruptiva calificada como joyería futurista fueron adornos corporales semejantes a tubos de estufa, piezas de pvc que se llevaban en la cabeza, cuellos hombreras o cuellos torre-top inusuales.

¿Qué propuestas se ven hoy? La diseñadora, escultora y fotógrafa paulista Ingrid Rizzieri crea, para su firma Entrecubos, de manera artesanal piezas geométricas algo maximalistas, que desafían el entorno de la cara, jugando con la nariz y boca, y también se despegan más allá de las manos. Siguen una estructura lógica, son cero anatómicas, sin embargo resultan de un exhaustivo estudio que consigue el equilibrio, por ejemplo, entre los dedos sin detener el movimiento de las manos.

Esta diseñadora de joyas admite que no tiene una nariz pequeña y delicada, su puente es alto y podría ser fuente de inseguridad para muchas personas, pero no para ella que bromea: «Es una casita para joyería». Comenzó con accesorios geométricos en forma de cubos y siguió con piezas faciales. Creó una inusual, a la que llama anillo para la nariz. Recuerda que vio unas gafas sin montura, con patillas solo en los lados y pensó que dejaban al descubierto un espacio de diseño hermoso en la nariz. Por entonces, hacía piezas con resina y madera y, hace un año, se dedicó de lleno al estudio de los metales. Aunque llamativas, admite que las joyas faciales ya no son una novedad y cita a la cantante estadounidense de neo soul Erykah Badu, que las popularizó en el escenario.

Fue un desafío conseguir llevar este accesorio a la vida cotidiana. «Tenía que entender las diferentes formas de la nariz y cómo encajaría esta joya. Así que busqué libros de  anatomía, cirugía plástica y hasta de maquillaje para entender los tipos de caras, rasgos y cómo destacarlos o adornarlos. Ese estudio fue fundamental para desarrollar joyas cómodas. No pueden tener mucha textura para no dañar la piel y necesitan encajar bien en esa región central de la cara. Para utilizar el accesorio no es necesario realizar un piercing en el puente de la nariz, ya que la joya es la presión. Sin embargo, recomiendo usar pegamento para pestañas postizas, indicadas para ojos y cara, para mantener el anillo en su lugar». Su aro nasal lo hace a pedido y se adapta a cada tipo de cara. Y fue sumando. Piezas no convencionales para el cuello, para los labios, hasta que llegó a las manos con anillos no menos inusuales, que relacionan de manera armoniosa los dedos con piezas que remiten a Calder, por ser algo cinéticos. Trabaja en bronce bañado en oro o en plata.

Como bien menciona Rizzieri, la novedad no es el punto sino el interés por realizar piezas originales. Antes que ella, Joanne Tan, joyera nacida en la periferia de Kuala Lumpur, Malasia, y residente en Londres, donde recientemente se graduó del Central Saint Martins, creó en 2016 una cápsula de joyería también centrada en la nariz. Tribal, la propuesta busca combatir la idealización mediática y la obsesión moderna de la belleza. Inspirada en «la cultura asiática de la cirugía plástica», diseñó piezas poco ortodoxas: puños nasales esculpidos en 18 quilates salpicado de perlas y diamantes, que siguen líneas curvas similares a cómo un cirujano trazaría las incisiones de una cirugía de nariz. Joanne T señala que con estos extravagantes accesorios pretende que cada uno acepte sus rasgos y no los borre por considerarlos defectuosos.

Otras propuestas más fashion que artísticas sirven también como antecedente o como señal de que se pueden llevar piezas de joyería en partes de la cara o el cuerpo, sin atarse a las convenciones. Al estilo de Rizzieri, el diseñador neoyorquino Thorn Browne hizo una propuesta de monóculos y símil lentes en metal para su colección prêt-à-porter del otoño del año último. De igual modo, las cápsulas joyeras de las colecciones de diseñadores europeos dieron cuenta de esta onda: el ucraniano Jean Gritsfeldt creó clips de gran tamaño con flores de cristal para la nariz y los labios que cuelgan sobre la barbilla reinterpretando la época dorada del cine en 2015. “Intento diseñar joyas únicas, pero que aún se puedan usar en la vida cotidiana”, sostuvo Gritsfeldt. Y la israelí Galia Lahav hizo lo propio con tiaras red para la cara y megacejas, entre otras, en 2018.

Hoy, en tiempos de reconocimiento facial, dos creativas hicieron foco más allá de la cara y las manos con un propósito determinado. La diseñadora de joyas polaca Ewa Nowak inventó, el año último, una suerte de escudo protector desde Noma, el estudio de diseño que creó con el diseñador Jarek Markowicz. Desarrolló un artefacto, símil máscara, anti IA (inteligencia artificial) ya que hace indetectable la cara de su portador para los algoritmos de identificación utilizados por las cámaras de vigilancia públicas. Su proyecto llamado Incógnito fue recientemente destacado en los Dezeen Awards 2020 en la categoría Diseño portátil y se expuso en Cómo desaparecer en Goodman Gallery, Johannesburgo.

Descripto por la diseñadora como «bisutería facial», la estructura principal del accesorio en forma de máscara consiste en una pieza de latón, que fue moldeada para adaptarse a los contornos de la cara y curvada detrás de las orejas como un par de anteojos. Cuenta con tres elementos destacados: dos círculos debajo de los ojos y un elemento rectangular colocado en el entrecejo, que se relacionan para hacer que la cara del usuario resulte  irreconocible.

Mientras la máscara de Nowak se concibe para confundir los conocimientos de inteligencia artificial, este año, la neoyorquina Sara Sallam creó un tipo más actualizado de joyería anti-rastreo. Pensó en máscaras protectoras inspirada en la novela distópica 1984 de George Orwell y diseñó tres piezas de joyería que se usan en la cara, en el pecho y en el pie, con dispositivos portátiles que también buscan proteger al usuario del reconocimiento facial, la detección de latidos del corazón o el seguimiento de la marcha. «Quería crear objetos para un futuro orwelliano, donde esta vigilancia es un lugar común”. Cada pieza tiene un efecto ondulado con detalles que remiten a una perla. Y eligió este acabado como referencia a las joyas Lover’s Eye, pinturas en miniatura populares en el siglo XVIII que presentaban un ojo, a menudo rodeado de perlas.

Con perlas también trabajó Pauline Müller para su colección de joyas faciales que incentiva experiencias corporales y visuales tanto para el usuario como para los espectadores. Dice que sus piezas generan cierta y momentánea metamorfosis facial, experimentando una apariencia alterada con fuerza visceral. «Con este trabajo, espero generar una exploración lúdica pero crítica de las prácticas a menudo minuciosas de modificación corporal o facial.»

Hay piezas de joyería deliberadamente concebidas para ser diseñadas con el fin de ser reproducidas en serie por la función que pretenden cumplir. Tal son las propuestas de algunos estudiantes de la Escuela de Arte y Diseño de Lucerna que amplían la definición de joyería. El collar corpiño, en seda laminada con elásticos, para pacientes con cáncer que sufrieron la amputación de una mama hecho por la suiza Megan Kelso es otra pieza poco ortodoxa en la que incursiona tras presentar otras, como anillos protectores de dedos o adornos que se llevan en la cabeza bordeando el pabellón auricular.

Algunas propuestas de joyería-audífonos también podrían inscribirse en la categoría de piezas corporales no convencionales. Sophie Mia Willener, estudiante de la misma escuela suiza, creó piezas en bronce fundido y latón con el objetivo de diseñar audífonos “visualmente ruidosos” para hacerlos más llamativos y dotarlos de su propia autonomía formal. «Su diseño se deriva de las trompetas de oído del siglo XIX, revitalizándolas como accesorios llamativos. Usando varios complementos, el audífono se convierte en un artículo de joyería de escucha para el usuario seguro de sí mismo». En la misma línea se pueden incluir a los auriculares joyeros inalámbricos creados con metales recuperados de desechos electrónicos por la firma Planet Beyond con el fin de promover la autoexpresión.


Escuela de María Medici

De visita | Escuelas

¿Qué se aprende en las escuelas de joyería contemporánea?

Salimos averiguarlo y hoy virtualmente llegamos hasta el taller-escuela de María Medici.

Cuál es y dónde queda. La Escuela de Joyería Contemporánea de María Medici está en Niceto Vega al 4600, en Palermo Viejo, desde hace 22 años.

Cómo es. El taller es amplio, tiene dos salas: una para dibujar, hacer maquetas, corregir y dar las clases teóricas, y otra que es el taller de producción, con capacidad para 10 personas; se suma un tercer espacio igualmente importante que es un patio lleno de plantas que comunica el interior del taller con el exterior.

Qué se enseña. Se ofrece un curso en tres niveles. En el primero se incluyen varias técnicas que se desarrollan durante el curso donde cada alumna/o  propone sus proyectos según el método que se enseña, siempre con un acompañamiento personalizado de su trabajo para lograr que puedan expresarse y comunicar ideas y conceptos. Se trabajan las técnicas de metal directo y fundición a la cera perdida, con ceras rígidas y blandas, papeles, hilos, puntillas y elementos de la naturaleza encerados, entre muchos otros. En el segundo nivel se hace un pasaje por distintos momentos de la historia del arte para tomar conceptos y  llevarlos a una pieza contemporánea. También se acompaña con técnicas (modelado de acrílicos, resinas, grabado en ácido, etc. para ayudar a definir las piezas. Se considera que lo importante es que las ideas lleven a hacer la joya y aprender a trabajar desde el concepto. Y en el tercer nivel se define un tema por todo el grupo y se trabaja el curso sobre esa propuesta generando colecciones. A esta altura de proceso, que se desarrolla durante tres años, se cuenta con un reservorio de técnicas, y cada uno elige como quiere trabajar libremente, partiendo desde donde mejor pueda expresarse: la forma, el color o diferentes elementos que resuelvan la materialización del o los objetos del proyecto personal.

En la escuela también se organizan experiencias creativas puntuales. “Mediante trabajos con papel, cartón, reciclados de plásticos, textiles u objetos encontrados, se apunta al desarrollo de la creatividad desde un lugar menos encorsetado por las técnicas de joyería tradicional. Esto ayuda mucho a liberarse del pánico a la hoja en blanco, y a preservar el medio ambiente con una mirada más ecológica en nuestro quehacer como joyeros”.

“El taller escuela apunta al desarrollo de la creatividad desde un lugar menos encorsetado por las técnicas de joyería tradicional. Busca que cada uno ame lo que produce con las manos y se tome su tiempo para reflexionar, expresarse a través de los objetos o joyas que realizan y para disfrutar del proceso creativo”, dice la maestra del enfoque de su propuesta.

Foto Gentileza Santiago Cichero/AFV para La Nación

Modalidad de trabajo. “Jugar mucho, ser disruptivos, no atarse a nada, dejar que cada alumno disfrute y hable a través de su trabajo de la manera más genuina posible. Permitirse la prueba y el error. Al aprender a trabajar en grupo, aun cuando cada uno trabaje sobre su proyecto individual, intento que las clases sean participativas y todos podamos opinar sobre las piezas del otro con un análisis crítico positivo”. Hoy se reconvirtió en un espacio virtual, en el que se llevan adelante clases a distancia con clases más teóricas que prácticas, y con seguimiento personalizado de proyectos.

Habilidades que se aprenden. “A amar lo que producen con las manos y a tomarse tiempo para reflexionar, para expresarse a través de los objetos o joya que realizan, para disfrutar del proceso creativo  en compañía de otros”.

Meta. Cada uno decide qué quiere hacer con su trabajo, orientarlo al diseño con colecciones seriadas o a la pieza de autor para presentar en galerías de arte u otros espacios de exposición, muestras colectivas, concursos, ferias etc.

Perfil. Es muy variado, no se necesitan conocimientos previos ni formación dentro del campo del arte o el diseño. Eso genera muy buena energía al encontrarse personas  con diferentes conocimientos  y  vivencias  personales.

Actividades. Anualmente, se organiza una muestra con los estudiantes del tercer nivel junto con otros que siguen en el taller durante muchos años. Un trabajo que genera una vivencia de grupo especial, no solo por hacer sus joyas de autor para la exposición colectiva sino también porque implica la elaboración del montaje, la presentación de fotos, flyer y mucho más.

Fotos Gentileza Melisa Levin


Cuando la joyería se hace en la universidad

Apuntes | Notas

Cuando la joyería se hace en la universidad


Varios claustros ofrecen espacios de capacitación y creación de piezas únicas e innovadoras, parte de proyectos de investigación que resultan de una formación superior especializada.

Mucho antes de llegar a galerías o museos, a vidrieras de tiendas o a su banco de joyero en ateliers personales, estudiantes universitarios desarrollan piezas de joyería contemporánea superinnovadoras. 

En la cátedra de Diseño de Accesorios de la UBA; en el departamento de Gemstones and Jewellery de la Universidad de Ciencias Aplicadas de Trier; en la maestría de Diseño de Joyas y Orfebrería de la Escuela de Artes PXL-MAD de Hasselt, Bélgica; en el Jewellery & Silversmithing del Edinburgh College of Arts; en la cátedra de Joyería y Objeto de L’ Escola d’ Art i Superior de Disseny de València; en el programa de Jewelry & Metalsmithing de la Rhode Island School of Design, y en la School of Jewelry & Metals Arts de la Academy of Art University de San Francisco, se incuban proyectos prometedores. Cuál es el enfoque de la formación que ofrecen que les permite resultados de calidad, qué hacen y cómo lo exponen. 

En un año académico signado por el impacto de la pandemia por COVID 19, los espacios de formación en joyería contemporánea fueron adecuando la metodología de trabajo al aislamiento social para seguir adelante con sus prácticas educativas. A la hora de difundir los trabajos de graduación o de fin de ciclo de su alumnado, alianzas con medios estratégicos, eventos interactivos en las redes sociales y shows digitales, fueron algunas de las propuestas ideadas para amplificar el alcance, tanto de quienes comienzan su carrera profesional como de las propias instituciones. Tal llegada nos permite conocerlos y valorarlos. Compartimos algunos de ellos. 

 

Universidad de Buenos Aires – UBA Argentina

Facultad de Arquitectura, Diseño y Urbanismo Diseño de Accesorios  – Cátedra Kweitel-Kohon

“La Cátedra Kweitel-Kohon es un espacio de acción, investigación y constante intercambio donde construir nuestros propios universos. La concepción de diseño lo planteamos como proceso, impulsando a los alumnos a bucear en diversos métodos y caminos para trabajar sobre distintos materiales, estimulando la experimentación y valorizando lo emergente y la sorpresa. No trabajamos sobre un fin programado y estipulado, sino que vamos construyendo, dialogando, debatiendo y re preguntándonos constantemente”, describen las docentes Francisca Kweitel y Guigui Kohon. 

Si bien la cuarentena por COVID 19 introdujo una nueva realidad de enseñanza remota, el lineamiento de la cátedra continúa por el camino de aceptar la incertidumbre, la duda y el cambio como parte de la vida y del crecimiento, y del proceso de construcción. “Nuestra forma de seguir los trabajos y colaborar en su desarrollo intenta ser poco invasiva, no les ofrecemos una solución a sus problemáticas, no hay respuestas fijas ni estructuradas, preferimos un cúmulo de preguntas que les abra a un nuevo análisis, pensamiento, reflexión, donde ellos encuentren su propia forma de ver y hacer las cosas”, apuntan las titulares de la cátedra. 

Hochschule Trier – Universidad de Ciencias Aplicadas de Trier, Alemania

Facultad de Arte y Diseño Gemstones and Jewellery at Campus Idar-Oberstein

El perfil del departamento de Piedras Preciosas y Joyería está moldeado por el debate interdisciplinario acerca de si la joyería es artesanía, arte o diseño. “Los estudiantes pueden vincular de manera activa y sostenible sus experiencias sensuales con sus pensamientos y acciones dentro de la sociedad. Al mismo tiempo, es importante tener en cuenta que, si bien el enfoque exclusivo en la propia brújula artística y, por lo tanto, emocional a menudo puede tener un cierto efecto terapéutico, a menudo no alcanza el objetivo real del trabajo desde un punto de vista social y es por lo tanto, bastante problemático”, expresa el claustro académico en su filosofía

Su Show de Graduados 2020 será en octubre próximo. En la plataforma IO&U, un espacio creado por un grupo de 12 joyeras y artistas contemporáneas recientemente egresadas del Campus Idar-Oberstein, se exhiben varios proyectos. 

PXL-MAD School of Arts Hasselt, Bélgica

Jewellery Design, Gold- and Silversmithing

El programa de la Escuela se divide en tres años de licenciatura y un año de posgrado. También se ofrece una preparación para la pre-maestría. El departamento, liderado por artistas, diseñadores y académicos de renombre, entiende que la experimentación y la investigación son elementos centrales. “El campo de la joyería contemporánea y la fabricación de objetos ocupa un lugar peculiar dentro del mundo de las artes visuales, la artesanía y el diseño. Esta posición ambigua puede verse como inspiradora y ofrece un marco perfecto para la innovación y la actitud crítica. En este contexto en constante cambio, se anima a los estudiantes a liberarse de preconceptos, para que puedan desarrollar su perfil artístico personal. Consideramos que la metodología y el enfoque son tan importantes como el estilo y la tendencia”, define la academia.

En el marco de la pandemia, la Escuela de Artes PXL-MAD presentó sus proyectos de graduación en el Virtual Design Festival – VDF, la plataforma creada a tal efecto fue dada a conocer por la publicación especializada en arquitectura y diseño Dezeen.

The University of Edinburgh, Escocia 

Edinburgh College of Art Jewellery & Silversmithing – BA (Hons)

El departamento de Joyería y Orfebrería se autodefine como un espacio pequeño y amigable. Su filosofía se basa en combinar la innovación con los conceptos artesanales tradicionales, tanto en técnicas como en materiales. El programa promueve la creación de las reliquias del futuro y los objetos sensoriales que enriquecerán la vida de las personas. “Les enseñamos a trabajar y a explorar el uso de una amplia variedad de materiales, incluidos metales preciosos, plástico, textiles, esmalte y piedra. Tenemos la reputación de mantener un alto nivel de habilidades manuales y diseño original, con el compromiso de contribuir con el desarrollo de una voz creativa clara y original a través del dibujo y el hacer”, manifiesta la Escuela de su metodología de trabajo.

Este año, la exhibición de los proyectos de graduación se hizo mediante Instagram. El evento alentó la interacción con la comunidad mediante un filtro -especialmente creado por la graduada Daniela Groza– que permitió probarse los diseños y compartir el resultado.

EASD L’ Escola d’Art i Superior de Disseny de València, España

Joyería y Objeto 

“En las aulas y talleres del departamento de Joyería de la EASD València, se impulsa igualmente la investigación conceptual y técnica, a la vez que se analizan la responsabilidad social y las implicaciones éticas de la profesión. La observación, el análisis, la crítica y la destreza comunicativa forman parte del enfoque metodológico de las asignaturas que integran estos estudios”, detallan desde la escuela. 

La experiencia de aprendizaje en el aula se complementa con una serie de actividades que contribuyen a introducir a los estudiantes en el espacio cultural de su futura actividad profesional. Algunas de ellas son: el encuentro bianual Melting Point. Joieria Contemporània València, la participación en concursos de joyería como el Premio José Arquero (Barcelona), Gioielli in fermento (Italia) o el Legnica International Jewellery Competition; también, la presencia en exhibiciones locales e internacionales como Schmuck, la Feria Internacional de Joyería en Munich, Enjoia’t y Joya Barcelona Art Jewellery & Objects

RISD – Rhode Island School of Design, Estados Unidos

Jewelry + Metalsmithing

Las carreras de pregrado y posgrado, que abarcan desde la orfebrería tradicional hasta los procesos y materiales experimentales, ofrecen una comunidad unida de estudiantes y docentes totalmente comprometida con la disciplina. El análisis crítico y un intercambio abierto de ideas apoyan la exploración individual de la relación de las joyas con el cuerpo.

RISD GRAN SHOW 2020 

La propuesta digital que reemplazó este año a la habitual exposición física, incluye el trabajo de más de 200 graduados y muestra la creatividad de los estudiantes en todas las etapas del proceso de tesis, desde bocetos y borradores hasta trabajos terminados.

Academy of Art University de San Francisco, Estados Unidos

School of Jewelry & Metal Arts

“Convierte tu amor por las obras de arte para vestir en una profesión”,  formula la Escuela de Joyería y Artes del Metal. La combinación de las técnicas tradicionales con tecnologías innovadoras como el láser,  la electrónica y el modelado en 3D, guían una propuesta educativa que incorpora principios sostenibles en la elección de los materiales y los procedimientos, a la vez que promete el desarrollo de un fuerte sentido comercial. La institución organiza los contenidos de diseño y empresariales en seis carreras. 

Spring Show 2020

Por primera vez en su historia, el Show de Primavera de 2020 se realizó virtualmente, reuniendo a miles de estudiantes, líderes de la industria, educadores y miembros de la comunidad para celebrar logros y establecer conexiones profesionales con personas de todo el mundo.


Entrevista a Agustina Ros

Apuntes | Notas

Elijo el vidrio porque me permite crear lo que imagino


Entrevista a Agustina Ros

Por Delia Alicia Piña

 

Trabaja el vidrio como pocos y dice que logró establecer una relación tal con este elemento que hasta involucra sus sentimientos. Será por eso que describe su proceso creativo con una pasión que contagia. Quién es la artista argentina que tiene un taller de investigación sobre un material inorgánico al que consigue dar formas únicas, con un llamativo manejo del color y la luz.

Va una síntesis de la previa de Agustina Ros que la llevó a destacarse en una especialidad en la que incursionan pocos.

Nació y creció en Misiones, donde desde muy chica comenzó a incursionar en el mundo del arte. Se trasladó a Buenos Aires para estudiar Artes Visuales en la Universidad del Museo Social Argentino, y además cursó talleres de dibujo, pintura, escultura y grabado. De regreso a su tierra colorada, trabajó en el taller de Artes del Fuego y por curiosidad descubrió el vidrio a la llama.

Para aprender esta técnica viajó a Barcelona, donde estudió con el artista vidriero Ferrán Collado. Completó con Simone Crestani (Italia), Amy Lemaire y Suellen Fowler; además aprendió neón y plasma aplicado al arte en vidrio con Jason Chakravarty y Joe Upham (Estados Unidos), y grabado con Paulina Cambalova (Rca. Checa). Se especializó en The Corning Museum of Glass y en Urban Glass, de Nueva York.

Tras su reconocimiento con el premio ganador del Enjoia´t Awards 2017, expuso en Melting Point Valencia, luego en Shanghai, Nueva York, Milán y, el año último, en Atenas y Off-Joya Barcelona.

Dice que Francisca Kweitel es su “hada madrina en la joyería contemporánea”, porque fomentó sus capacidades de diseño, de creatividad, de resolución y le aportó una mirada sensible y propia. “Generó en mí la necesidad de liberar, exteriorizar, para encontrar en el afuera, en el otro, en su reacción, la respuesta a todo aquello que es mi todo”. Además de esta formación que siempre destaca, sumó con la joyera barcelonesa Gemma Draper.

Instalada en la capital catalana creó Barcelona Glass Studio, desde donde se proyecta con una ambiciosa pretensión: “Generar la cultura del vidrio para posicionar este arte en el centro de la escena mundial”. Desde su taller cuenta qué hace, cómo y por qué.


_¿Por qué elegiste crear en vidrio?

_Desde el primer contacto que tuve con este material, sentí fascinación y conexión, y despertó en mí una infinita curiosidad por esta técnica tan tradicional y estricta que involucra fuego y disciplina, por la inmensidad de posibilidades creativas que ofrece, por la mezcla de tradición e innovación que implica y por su belleza. Elijo el vidrio porque me permite crear lo que imagino. Lo descubrí antes de la joyería contemporánea. Fue una elección mutua: vidrio-yo. Su aplicación surgió como respuesta de toda demanda, autenticidad, experimentación e irrupción en esquemas preestablecidos. Y me planteo proyectar un encuentro futuro entre la obra y el otro.

 

_¿Qué buscas decir a través de tus obras?

_Expresarme. Al inicio, la joyería contemporánea fue el medio, el conducto a través del cual encontré la exquisita forma de expresar mi arte en vidrio. Mis obras son pequeñas esculturas de materiales alternativos que esconden un fin utilitario.

 

_¿Cómo es trabajar con llamas?

_Intenso, demandante, peligroso, agotador y absolutamente maravilloso. Mi proceso creativo comienza con la antorcha. Trabajo tanto con llamas grandes como pequeñas, según la pieza que quiero conseguir. Soplar y modelar es lo mío. Luego, vaporizo ​​metales nobles, como el oro y la plata, para teñir el vidrio con tonos que se desvanecen naturalmente.

Durante la manipulación de vidrio en caliente logro abstraerme del exterior e involucrarme en el proceso creador de un modo que jamás había experimentado antes de dedicarme a este material. Me conecta con mi yo interior. Cuando estoy modelando una pieza frente al soplete, variando la intensidad de la llama, soplo y doy volumen, y mientras giro permanentemente la pieza para controlar la gravedad, el fuego está a centímetros de distancia de mis manos y cara, tengo contacto directo con el material, estoy en riesgo constante y jamás puedo desviar mi atención. Es oficio, es arte. Evolucionar con él requiere entrega. Tengo una relación profunda con el vidrio, hay muchos sentimientos de por medio.

“Cuando modelo una pieza frente al soplete, varío la intensidad de la llama, soplo y doy volumen y giro permanentemente la pieza para controlar la gravedad; el fuego está a centímetros de distancia de mis manos y cara, tengo contacto directo con el material, estoy en riesgo constante y no puedo desviar mi atención”.

_¿Qué técnicas usás y en qué consisten?

_Flameworking o lamworking es el nombre de la técnica que mayormente utilizo e implica sopletes de oxígeno/gas. Trabajo con vidrio de borosilicato -un tipo de vidrio con óxidos de silicio y boro- porque me permite explorar con más libertad. Fue más conocido por la marca Pyrex -que introdujo el vidrio borosilicatado transparente de baja expansión térmica y lo utilizó para utensilios de cocina y luego para cristalería de laboratorio-; con el boro, el vidrio se destaca por ser más estable y más resistente; es que fue creado especialmente para hacer del vidrio un elemento menos frágil y más utilitario.

Con la aplicación de la técnica de flameworking, por ejemplo, me propuse crear formas mínimas, soplando y modelando el vidrio. Luego, conseguí contraste añadiendo el proceso de espejo, al usar una técnica antigua en vidrios, y envejeciendo la plata con oxidación; algunas piezas están grabadas para generar textura. Esto se ve en la colección Old reflection, resultado de una larga investigación que mostró los efectos del tiempo sobre un objeto. Me interesó provocar melancolía para despertar la noción del tiempo o recrear esa sensación de nostalgia en el otro que siempre brotan en mí cada vez que advierto las huellas que deja el pasado. Los anillos de esta serie son un paseo durante el tiempo del material: vidrio borosilicato y plata. En general, la joyería contemporánea que innova es el resultado de una larga investigación.

 

“Me interesó provocar melancolía para despertar la noción del tiempo o recrear esa sensación de nostalgia en el otro que siempre brotan en mí cada vez que advierto las huellas que deja el pasado”.

 

_¿Cómo conseguís esos colores y esa translucidez?

_La base de mi objetivo estético y conceptual siempre estuvo ligada con mi intención de proyectar mi visión, resaltando en la creación la potencia de la materia. Utilizo la luz natural como otra protagonista que influye activamente en la percepción de la obra. Busco iridiscencia en la superficie y por eso aplico vaporización de metales nobles para dar esfumados de colores tornasolados. La translucidez es la única cualidad del vidrio que busco preservar. Los anillos de la colección Gold reflection también nacieron como resultado de una investigación del color y la experiencia de la transparencia. Me encanta explorar nuevas formas de experimentar. En esta colección, las formas están sopladas y modeladas en vidrio borosilicato con flameworking. Los colores se seleccionaron probando los efectos reflectantes del oro humeante sobre las piezas sin perder la translucidez. Así cuando el anillo juega con la luz, aparecen reflejos y tonos. Es que el color y la forma brillan siempre como recurso de variación inagotable y ofrecen a la vista innumerables perspectivas influenciadas por la luz del entorno y su fluir cambiante.

 

“El color y la forma brillan siempre como recurso de variación inagotable y ofrecen a la vista innumerables perspectivas influenciadas por la luz del entorno y su fluir cambiante”.

 

_¿Aplicás un método propio para conseguir formas más modernas?

_Como no uso moldes, cada pieza es una realización única. Cada movimiento significa  una inspiración momentánea y marca la esencia de cada obra. Las formas son causa y efecto de mi idealización.

 

_¿Cómo definirías tu estilo o estética?

_Es difícil definirse a uno mismo, porque creo que el estilo en mi obra surge naturalmente ya que me transpolo a mí misma en cada realización.

Al mismo tiempo, el discurso estético que aplico en mi trabajo se basa en la combinación entre los conceptos de arte (desarrollando mi bagaje escultórico y de pieza única), diseño (utilidad) y artesanía (técnica y material de oficio), además de armonía y  equilibrio.

“Me encanta explorar nuevas formas de experimentar. En esta colección, las formas están sopladas y modeladas en vidrio borosilicato con flameworking. Los colores se seleccionaron probando los efectos reflectantes del oro humeante sobre las piezas sin perder la translucidez.”

_¿Cuán portable es una joya de vidrio? ¿Te consultan por la durabilidad?

_Constantemente. En el imaginario general las personas asocian al vidrio con la fragilidad. Mi cometido es desmitificar este concepto demostrando su resistencia. El borosilicato es un vidrio duro que fue creado molecularme para ser fuerte, como mencioné. Su composición es similiar al quarzo y, por eso, insisto, lo elijo. El resto de los vidrios blandos, como murano, float y dicroico, en cambio, son más delicados.

 

_¿Qué es la joyería contemporánea para vos?

_La joyería contemporánea es la conexión entre la obra y la persona. El medio que me permite comunicar fielmente mi yo y disfrutar durante el proceso creativo.  Personalmente, es el momento en el que desarrollo cada creación y reflejo el corazón de la obra. Mientras trabajo con el vidrio, de repente encuentro diversos movimientos y la reflexión de luz que tanto me atrae e intento conservarla. Lo que me motiva e inspira es la búsqueda y la experimentación.

 

_¿Cuál es el alcance de la joyería en vidrio?

_Infinito. Cada vez encuentro más personas interesadas en el material. El vidrio necesita dedicación y entrega, constancia y paciencia, pero nos brinda millones de posibilidades, y sigue siendo muy virgen, queda mucho por descubrir y me hace mucha ilusión imaginar todo lo que vendrá.

 

_¿Qué otras posibilidades ves en el vidrio que te gustaría experimentar?

_Vivo en constante exploración y exprimo profesionalmente todas las vías de trabajo que mi oficio permite. Regularmente, genero clases de Introducción a la manipulación de vidrio en mi estudio de Barcelona. Desarrollo mi línea de joyería en vidrio. Además produzco para otros diseñadores y artistas.

Actualmente estoy desarrollando en paralelo, un proyecto de luminaria y objetos en vidrio con una arquitecta. Intentaremos develar una línea inspirada en mis colecciones de joyería para en un futuro comercializarla.

“Lo que me motiva e inspira es la búsqueda y la experimentación.”


Taller Abierto de Cecilia Capisano

De visita | Talleres

Taller Abierto de Cecilia Capisano


Tiene muchas puertas por abrir porque trabaja en dos talleres diferentes y complementarios. Cuenta cómo entre Sáenz Peña y Palermo desarrolla sus joyas contemporáneas

Trabaja en dos talleres propios que tienen dinámicas muy diferentes pero complementarias. Su primer taller fue el de su casa en Saenz Peña, en el oeste del Gran Buenos Aires, y fue creciendo en paralelo a sus estudios de joyería contemporánea. Es diseñadora gráfica de la UBA y estudió guión cinematográfico, formación con que logró una mirada sintética y conceptual y una resolución morfológica presente en su joyería contemporánea, disciplina a la que llegó de la mano de María Medici, Marina Massone y Francisca Kweitel.

Aún hoy sigue equipando este atelier. Hace 10 años comenzó con un banco joyero y fue sumándole todo tipo de máquinas y herramientas hasta el punto de pasar a habitar “un taller con casa, en vez de una casa con taller”, dice.

Cuatro años atrás, al inaugurar en el barrio de Palermo el local Capisano, en  Nicaragua 4627, tuvo la necesidad de montar in situ su segundo taller. Más pequeño y a la vista del público, le permite capitalizar el tiempo libre mientras no está interactuando con la gente que visita su local. Curiosamente, con el tiempo, observó que su proceso creativo y su dinámica de trabajo, estaba condicionada por características casi opuestas de ambos espacios.

El taller montado en su vivienda está equipado con máquinas grandes y pesadas. En cambio el taller de Capisano, sólo tiene herramientas medianas y torno de mano. Por eso, en el grande trabaja con máquinas que generan polvo, ruido y hasta olor. Es que lija, pule, suelda, hornea, cose y tornea, acciones que implican poner el cuerpo además de su mente. El tener todas las máquinas juntas, le permite improvisar en el hacer. “Trabajar al borde del caos, literalmente, saltar de una máquina a la otra… comenzar soldando en el taller y quizás terminar con otra herramienta en el patio al aire libre. Poner la música fuerte… ensuciar sin preocuparme por los rastros que voy dejando durante todo el proceso. Experimentar, colgar en las paredes, poner todo el proceso a la vista y analizarlo”, relata

En cambio, el orden y la diferencia de escala con el taller de Palermo hace que allí se enfoque más en el proceso de visualización, que es silencioso e interno.

“La visualización es muy inherente a mi formación inicial como diseñadora gráfica y es pilar fundamental durante mis procesos creativos. En Capisano, escribo mucho y pienso en imágines todo el tiempo. En mi mente cambio de materiales, de color, corrijo formas y sobretodo agilizo etapas. También descubrí que al estar enfocada en tareas mecánicas y repetitivas de finalización de piezas, mi creatividad fluye. Así es como muchas veces visualizo en mi mente una idea en Capisano, que luego bajaré y la pondré a prueba en el taller de mi casa en Saénz Peña”.

Trabaja con todo tipo de materiales. Experimenta y juega con cuero, resina, cera, cemento, vidrio, cerámica, bronce y otros metales, por ejemplo. Es autodidacta a la hora de vincularse con una herramienta, máquina o material nuevo.

Señala que conocer la manera correcta de aplicar una técnica nueva no la motiva en absoluto, por eso, reconoce que aprendió a acercarse a los materiales desde lo intuitivo, sin preconceptos. Estudia y experimenta con los límites de los materiales. Los fuerza, intenta romperlos, trata de sacarlos de su su confort. “Me interesa indagar tal como si les hiciera una primer entrevista. Saber cuánto puedo pedirles, preguntarles hasta dónde pueden estirarse sin quebrarse, doblarse sin romper, calentarse sin quemarse, sufrir transformaciones, sin dejar de ser ellos mismos. Así como también estudiar sus puntos de transformación totales, llegando incluso a no poder ser reconocidos”.

Admite que casi nunca toma un curso de técnica, porque dice que la teoría muchas veces la limita y se siente más libre conociendo menos. Sin embargo su fuerte es mezclar técnicas que reinventa. “Surgen más errores, nuevas oportunidades, nuevos lenguajes… Reconozco cuando el diálogo se vuelve más fluído en la interacción con máquinas y materiales, como si encontráramos juntos una manera de comunicarnos”. La mayoría de las veces necesita contar una historia y éste es el disparador inicial de su proceso creativo. Pero explica: “También sucede que durante el proceso de trabajo surgen bifurcaciones, caminos nuevos a seguir y quizás replanteo la historia inicial que necesitaba compartir”.

Es creativamente verborrágica y se aburre si se queda mucho tiempo en un mismo lugar, por eso se siente muy cómoda en la joyería contemporánea que le permite cambiar de materiales, sobre todo,cuando agoté la conversación, mezclé técnicas y conté historias nuevas todo el tiempo”. Será por esto que aprendió a trabajar en paralelo, en varios proyectos a la vez.

En la actualidad está muy enfocada en Capisano (local de Palermo). Queriendo volver a ese espacio de acuerdo con la flexibilización de la cuarentena. Cuatro años después de su apertura, señala que recién ahora tuvo tiempo para reordenar, emprolijar sus procesos. “Estoy desarrollando nuevas colecciones y piezas que me representen. Trabajo en seguir habitando cada vez más ese espacio que adoro. Siempre creo que lo mejor está por salir a la luz… intento ser un poco más sincera y profunda a la hora de contar una nueva historia o transmitir un estado de ánimo. Seguiré en esta búsqueda”.


Las joyas indiscretas

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Las joyas indiscretas

Un gesto simple, una mínima expresión, un trazo sutil. Net, delicada y precisa. Tan clara y fuerte a la vez, que cumple muy bien con el precepto de Mies Van der Rohe: menos es más. Así son las piezas finas y lineales de Teresa Estapé.

Su último trabajo, Sin joyería, es “una serie de joyas casi invisibles, pero preciosas y caras, que solo son visibles para quien está informado de su existencia”, explican desde Galler Bernhard Bischoff & Partner donde lo exhibe como parte de una muestra conjunta con la artista también catalana Anna Dot, invitadas por Erich Weiss, curador de la puesta, que sumó selección de la obra del pintor suizo Otto Tschumi y de la surrealista checa Toyen, todo bajo el título de Las joyas indiscretas.

Una serie limitada y exclusiva.

Singulares piezas lineales

Una propuesta que forma parte de Les bijoux indiscrets

La muestra puede verse hasta el sábado 19 en la galería Bernhard Bischoff ubicada en un centro único de arte contemporáneo en Berna.


El poder de la felicidad

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El poder de la felicidad

«Me considero una persona feliz. Como todos los demás, tengo momentos maravillosos y alegres en mi vida, pero también momentos estresantes y agotadores. El punto es que la felicidad es una forma de pensar y realmente creo que podemos elegir la dirección que tomará nuestra forma de pensar. Una actitud positiva y el buen humor pueden ayudarnos a conseguir nuestros objetivos, pero sobre todo pueden esparcirse a nuestro alrededor y dentro de nosotros de forma exponencial», dice Thereza Pedrosa.

En un año difícil y desafiante para la mayoría hizo una invitación personal a los artistas para que piensen en positivo, avancen con un propósito saludable, tengan esperanza en el futuro compartan estas emociones con la gente a su alrededor.

El resultado es un increíble grupo de 20 artistas de más de 10 países diferentes que exhiben 110 pares de aros hasta el 14 de septiembre en La Thereza Pedrosa | La galería Beautiful People Live Art.

Pendiente de Jeemin Jamie Chung en latón, plata, pigmento y oro

Linea 1 de Anke Hennig en rayón, nylon y plata 925

Formas Madre de Carla Riccoboni en plata 925

Paisaje de Claudia Steiner en cobre y resina

Alphabet de Carla Riccoboni en plata 800

homenaje a la montaña de Lluís Comín en plata, oro 750, lapislázuli, dos perlas keshi

Armatures and Shadows de Maria Tsimpiskaki en latón, plata, PVC, pigmentos y fósiles

Orange Blue de Nicola Heidemann en titanio, esmalte y acero inoxidable

Participan Aişegül Telli, Anke Hennig, Carla Riccoboni, Caterina Zanca, Clara Del Papa, Claudia Steiner, Gigi Mariani, Heidemarie Herb, Jeemin Jamie Chung, Jil Koehn, Judy McCaig, Lluís Comín, Maria Rosa Franzin, Maria Tsimpiskaki, Nicola Heidemann, Nicolas Estrada, Patrizia Bonati, Sara Barbanti, Ylenia Deriu, Yoko Takirai y Pietro Pellitteri.


Kit para sobrellevar el distanciamiento social obligatorio

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Kit para sobrellevar el distanciamiento social obligatorio

¿Cómo sobrellevar el distanciamiento social obligatorio? Elvira Cibotti armó un kit joyero que busca conectar con emociones y sentimientos para paliar la pandemia.

«La actual pandemia que sufre el mundo entero desencadenó distintas medidas para resguardar la salud pública. El distanciamiento social obligatorio parece ser la más implementada. En lo personal, fueron muchas las emociones que experimenté desde que empezó la cuarentena en mi país. Por esto que decidí armarme este kit, que lejos de ayudarme con recursos externos, me conecta con emociones y sentimientos propios a los cuales puedo recurrir para transitar de la mejor manera posible esta situación tan inusual«

Cuenco Afecto (rojo). Venta libre. Hecho en Argentina. Acción terapéutica: mejora el estado amoroso y afectivo en general. Indicaciones: Tratamiento indicado para aumentar las cantidades de amor, afecto, cariño, abrazos, besos y caricias percibidas en el cuerpo y en el alma. Posología: portar en el cuerpo el tiempo que se desee o hasta sentirse reconfortado. Contraindicaciones: Ninguna. Efectos secundarios: mejora la apariencia y la imagen corporal. Fecha de vencimiento: No tiene. Mantener fuera del alcance del agua”

Cuenco Optimismo (verde). Venta libre. Hecho en Argentina. Acción terapéutica: mejora el estado de desesperación. Indicaciones: tratamiento indicado para subir los niveles de esperanza, optimismo, confianza, ilusión y fe. Posología: portar en el cuerpo el tiempo que se desee o hasta sentirse reconfortadoContraindicaciones: ninguna. Efectos secundarios: mejora la apariencia y la imagen corporal. Fecha de vencimiento: no tiene. Mantener fuera del alcance del agua.

Cuenco Paciencia (azul). Venta libre. Hecho en Argentina. Acción terapéutica: mejora el estado de irritación y nerviosismo. Indicaciones: tratamiento indicado para serenarse y recuperar la calma, tranquilidad, paciencia y paz Interior. Posología: Portar en el cuerpo el tiempo que se desee o hasta sentirse reconfortado. Contraindicaciones: ninguna. Efectos secundarios: mejora la apariencia y la imagen corporal. Fecha de vencimiento: no tiene. Mantener fuera del alcance del agua.

Cuenco Alegría (amarillo). Venta libre. Hecho en Argentina. Acción terapéutica: mejora el estado anímico. Indicaciones: tratamiento indicado para sentir felicidad, entusiasmo y alegría. Facilita la producción de sonrisas, risas y en algunos casos carcajadas. Posología: portar en el cuerpo el tiempo que se desee o hasta sentirse reconfortado. Contraindicaciones: ninguna. Efectos secundarios: mejora la apariencia y la imagen corporal. Fecha de vencimiento: no tiene. Mantener fuera del alcance del agua.

Collar cuenco Alegría

Optimismo

Paciencia

Un trabajo, que se exhibe en el evento online #Antivirus de Tincal Lab dirigido por Ana Patricia Pina en Oporto, con los beneficios de sus collares-cuencos hechos mediante una adaptación propia de la técnica japonesa mokume-gane sobre papel reciclado con plata e hilo.